En las sesiones individuales asiste una única persona. Puede ser el caso de que quién acude a tratamiento desee trabajar un aspecto personal o relacional desde la visión propia, fortalecerse psíquica y emocionalmente frente a algo o alguien, asesorarse y orientarse frente a una situación concreta. En ocasiones se combinan las sesiones individuales con otras de pareja o familiares, en función del diseño de tratamiento que se haya hecho para cada caso o de que la situación lo requiera.
En terapia individual trabajamos los pensamientos, emociones y conductas como forma de comprender lo que te está ocurriendo y como punto de partida para buscar soluciones eficaces.
Dentro de la terapia individual se puede trabajar con niños, adolescentes o adultos.
Las problemáticas por las que se suele consular a nivel individual son muy variadas. Algunas de ellas son ansiedad, depresión, malestar en relaciones de pareja o familiares, dificultades en el trabajo, duelo, toma de decisiones…